Salvador Torras Domènech
Del 1910 al 1915, Salvador Torras Domènech va exercir com a president de la Cambra de Comerç i Indústria de Girona.
De la constitució se’n va fer ressò el Diario de Gerona de Avisos y Noticias:
En el local del Fomento tuvo lugar ayer la reunión convocada para constituir la Cámara de Comercio de esta ciudad.
Ya sea por circunstancias que desconocemos ya sea por la apatía que caracteriza nuestra ciudad, no acudió el número de personas que era de esperar, dada la importancia del asunto que motiva la reunión.
Después de inscribirse los presentes y darse cuenta de algunos nombres de personas que habían con anterioridad manifestado podía considerárselas como inscritas se procedió al nombramiento de la Junta directiva que lo quedó en la siguiente forma:
D. Salvador Torras Domenech, Presidente.—D. Joaquín Franquesa, Vicepresidente 1.°-D. Cristóbal Grober, id. 2.°-p, Francisco Monsalvatje, Tesorero —D. Jaime Garriga, Contador.—D. Federico Bassols, Archivero.—Don José Gómez Mirla, Secretario -D José M. Pérez Xifra, don Ferreol Sarrá, don José Pascual, don Ramón de Berenguer, don Juan Amich y don Jaime Martínez, vocales.
Així també se’n fa ressò del moment de la seva dimissió, el 1915:
En la sesión extraordinaria celebrada por la Cámara oficial de Comercio de esta ciudad el día 13 del corriente mes se dio cuenta de una cariñosa carta de D. Salvador Torras Doménech renunciando el cargo de Presidente de la Corporación con motivo de haber trasladado su residencia a Barcelona. Al despedirse el Sr. Torras de la Corporación mostró su gratitud hacia todos los que le han secundado en su labor, manifestando que su ausencia no significaba un alejamiento completo, ya que continuaba siendo elector de la Cámara y le había de interesar siempre la marcha de la misma. La Cámara, dada la circunstancia que la motivaba, aceptó con sumo pesar la renuncia.
El 30 de setembre del 1915 es va declarar un incendi en uns magatzems que l'agent de transports José Corcoy tenia a Girona on hi havia dipositada una gran quantitat de pasta de paper propietat de Salvador Torras. En senyal d'agraïment per la tasca feta durant l’extinció del foc, Salvador Torras va lliurar la quantitat de 100 pessetes als bombers. Així queda reflectit en l'acta d'una sessió de l’Ajuntament gironí:
El Sr. Oviedo manifestó que don Salvador Torras Doménech le había hecho entrega de 100 ptas. para que sean repartidas entre los bomberos de la Compañía municipal como premio a su comportamiento en la extinción del incendio ocurrido en el almacén del señor Corcoy. Se acordó hacer constar en acta el gusto con que veía el Ayuntamiento la conducta observada por el señor Torras.
L’any 1916, la Revista de la Banca Ilustrada publica, sota el títol "D. Salvador Torras Domènech - Presidente de la Cámara de Comercio e Industria de Gerona", publica:
No sólo en Gerona, sino en la amplia esfera industrial de la nación, es ventajosamente conocido el señor Torras Doménech porque consagrado al trabajo desde su juventud es uno de los hombres que más han contribuido en la región catalana a enaltecer la industria y a dignificarla, dándola modernas orientaciones para que abandonando los cauces en que por costumbre o rutina se desenvolvía, pudiera desarrollarse por más amplios y dilatados horizontes.
Para ello era necesario, además de las dotes de inteligencia y laboriosidad que le adornan, una perseverancia sin límites para estudiar en sus múltiples aspectos las necesidades y aspiraciones de la época, pues es indudable que si la civilización se exterioriza primeramente en los países más adelantados en las diversas manifestaciones de la actividad, no tarda mucho en irse extendiendo a los demás, modificando gustos, hábitos y costumbres.
Por esto precisamente, los países más progresivos son interesantes libros en cuyas páginas pueden los espíritus observadores adquirir un verdadero caudal de conocimientos relacionados con una serie de reformas y mejoras que previas determinadas preparaciones de diversa índole, porque no existe uniformidad en todos los pueblos, pueden asimilarse á éstos sin que en la adaptación pierdan nada de su eficacia ni de su virtualidad. Por el contrario, sancionadas en los países en que se han estudiado, llevan a aquellos a que son exportadas, a la vez que el atractivo de la novedad la garantía de su utilidad y la de los buenos resultados que con ellas se obtienen en la práctica, razón por la cual siendo bien acogidas desde el primer momento, no tardan mucho en imponerse y en ser apreciadas en su verdadero valor.
En la esfera industrial, especialmente, esto es lo que sucede, y comprendiéndolo así, sin duda alguna, el Sr. Torras Domónech viene dedicado desde hace muchos años a la meritoria labor de ir siguiendo paso a paso las innovaciones y perfeccionamientos que experimenta en el extranjero la fabricación de papel, por ser ésta el principal objeto de su explotación.
Ese incesante estudio le ha permitido conocer desde el primer momento cuantas máquinas y útiles para la especialización de su industria se han ido inventando en el extranjero y los resultados con ellos obtenidos, por cuya razón ha podido con conocimiento de causa hacer una inteligente selección e ir adquiriendo para su fábrica la maquinaria más perfecta y más recomendable porque simplificando el trabajo, aumenta la producción, mejorando su calidad.
Por esta causa la fábrica que posee y dirige nuestro biografiado con su indiscutible competencia está montada con arreglo a todos los adelantos modernos, pudiendo competir con las mejores en su clase.
Y no se ha limitado a esto solamente la labor del Sr. Torras Domenech, sino que por el contrario, haciendo compatible con sus tareas industriales el estudio de los problemas económicos, ha dedicado a éstos preferente atención, llegando á ser una verdadera autoridad en la materia, solucionando con alteza de mires muy plausible las cuestiones más complicadas y difíciles relacionadas con la economía nacional.
Enemigo de la adulación, de las luchas de encrucijada y de las contiendas personales vive, ni envidioso ni envidiado, completamente alejado de la política activa, en cuya atmósfera enrarecida por las pasiones, es probable que se hubiera malogrado como tantos otros que poseyendo inmejorables condiciones para haber contribuido en la esfera industrial al engrandecimiento de la patria, han fracasado en el campo político realizando una labor estéril por todos conceptos.
Hace bien, en nuestro concepto, en poner inteligencia y voluntad al servicio de la industria española, porque así se contribuye a hacer patria, a robustecerla y a dignificarla, aumentando sus fuentes de producción y de riqueza. Así el Sr. Torras Domenech vive en su elemento, querido y respetado de las clases Industriales y mercantiles de Gerona que admirando la labor por él realizada y reconociendo lo mucho que vale, le eligieron por unanimidad al reconstituirse la Cámara de Comercio e Industria de aquella capital, para la presidencia de este importante organismo, en el que nuestro biografiado evidencia sus singulares dotes de inteligencia, ilustración y laboriosidad en beneficio de esos valiosos elementos que son insustituibles como alma y vida de los pueblos modernos.
El mejor elogio que puede hacerse de su gestión en tan importante cargo es hacer constar que fue reelegido para el mismo al efectuarse la primera renovación reglamentaria.
Hombres así, son de los que España está necesitada para que se conviertan en realidades sus justas y legítimas aspiraciones. Su neutralidad actual demuestra que ya no sueña ni acaricia ideales románticos de extraordinario poderío; quiere sí, dignificarse y engrandecerse, pero no por las armas, sino por medio de la actividad fecunda del trabajo incesante y por esto son más estimables para ella quienes como el Sr. Torras Domenech, parte de cuya labor dejamos esbozada, ponen el mayor empeño en el perfeccionamiento de su industria, ejemplo que al ser imitado por todos nos permitiría algún día hombrearnos con los países más cultos y progresivos.
El 1920 es va casar la seva filla gran, Maria Assumpció, amb un hisendat de Flaçà:
En la Real Basílica de Nuestra Señora de la Merced de Barcelona, contrajeron matrimonio el pasado sábado, el joven hacendado don Buenaventura de Viñals y de Font, y la virtuosa señorita María de la Asunción Torras Riviere, hija del fabricante don Salvador Torras Domenech.
La segona, Matilde, es va casar amb l'empresari Avel·lí Trinxet i Pujol. L'Anna Maria Torras es va casar amb l'arquitecte Pere Benavent de Barberà i, la petita, Margarida, amb Josep M. Coromina.
El 1933, Anna Maria Torras funda a la Colònia el Centre de Cultura, amb la finalitat de preparar culturalment el personal femení amb vista al matrimoni.
L’any 1942 mor a Barcelona Salvador Torras Domènech, a l’edat de 76 anys, i és enterrat a Bonmatí.
